Pero no voy a hacer repaso del año, aunque lo mismo no me iba mal hacerlo. Si lo pienso no ha sido malo: casa nueva, coche nuevo, sobrina nueva y 12 meses compartidos con una tía genial. Pero a pesar de todo me siento derrotada, hoy me miro y me parece que fracaso en todo, vuelvo a sentir esa sensación de estar un poco de más en todas las partes y puede que no sea justo pero es así. Esta noche a disfrazar mi cara de sonrisa y a cenar con gente que no soporto simulando que me caen estupendamente. Un poco más de hipocresía. Total, yo tampoco les caigo bien y también disimularán como si no nos conociésemos ya todos.
Este año me falta la San Silvestre, el año pasado me apunté y al final no corrí porque no me encontraba bien, este año ni me he apuntado... el año que viene ¿qué? Lo echo de menos, echo de menos comer pronto hoy y ponerme la camiseta y pensar que me voy a helar de frío pero que me lo voy a pasar de vicio y llegar corriendo a casa a cenar pensando en lo bonito que es Madrid.
En fin, que me gustaría acabar el 2008 con otro ánimo, pero así está el tema hoy. La canción, una vez más, la de Mecano, porque aunque este año tengamos una más para acompañarnos con las uvas (aunque probablemente esté durmiendo a eso de las 12 o peor... puede que esté llorando) yo seguiré echando de menos a esa persona que siempre nos explicaba cuándo los cuartos se convertían en campanadas, la persona que siempre hacía que empezásemos a comer las uvas antes o después de tiempo y que fuera imposible acabarlas porque nos atragantábamos con la risa, quizá lo que da buena suerte no sea comerlas todas sino no empezar el año riendo. Ojalá estuviera aquí ahora.
Y aunque para las uvas hay algunos nuevos
a los que ya no están echaremos de menos
y a ver si espabilamos los que estamos vivos
y en el año que viene nos reimos
Mecano
¡¡¡Feliz 2009!!!