Las mejores cervezas del año. 2012.



Si hace pocos días publicábamos un corolario con algunas de las entradas que desfilaron por el blog a lo largo del 2012, hoy vamos a comentaros las cervezas que mejores sensaciones nos dejaron a lo largo del año.


Artesanas locales.

Para empezar, quería hacerlo con las cervezas de aquí, ya que sin duda, comparado con los años anteriores, el ya pretérito 2012 ha marcado un salto no solo en lo cuantitativo, que en el fondo es lo menos importante y más con tan poco recorrido como tiene el "movimiento" (o moda, o cómo cada cual quiera llamarlo...), sino sobretodo en cuanto a calidad. Ha habido varias elaboraciones que me sorprendieron por su nivel realmente destacable pero por encima de todas hay dos que no por conocidas y aclamadas dejan de merecer todos y cada uno de los cumplidos.

Hablo indudablemente de Naparbier y de Dougall’s, ya que el nivel enorme de sus cervezas, ligado a una constancia encomiable ofrecida en cada lote, además del espíritu innovador y las constantes e interesantes novedades de los navarros, son dignas de todos los elogios habidos y por haber. Pero sería injusto hablar únicamente de estas dos así que abajo os dejo un listado con 6 auténticas joyas.

- Naparbier ZZ+ (antes Amber ale). No sé cuantas veces habré repetido esta cerveza a lo largo del año, en botella y en barril, algo que raramente ocurre por el simple hecho de que casi nunca repito una cerveza (habiendo tanto qué probar, ya sabéis…). Sin duda esta auténtica maravilla lo merece de sobras.
- Dougalls 942. Simplemente perfecta. Increíble lo bien atada que está por todos lados. Al igual que la anterior, una de las pocas que no me canso de repetir.
- Agullons Edgard. Una auténtica barbaridad. Si algún neófito en este mundillo quiere comprobar el porqué de tantos halagos hacia Carlos, ésta muestra de maestría lo explica muy bien.
- Guinea Pigs ‘95 (botella). No me gustan las elaboraciones con tanto bombo y platillo. El precio en este caso tampoco ayudaba mucho. Pero si hay que quitarse el sombrero con una Imperial IPA local al estilo yankie sin duda ésta lo merece. Felicidades a sus padres.
- Marina The Grim North. Esta black IPA hecha en colaboración entre los hermanos de Blanes con Steel City nos enamoró lenta y sutilmente a cada trago. Una auténtica delicia.
- Laugar Pasote. Estos mozos con txapela rebosan tanto cachondeo como maestría a la hora de hacer cerveza. Espero que por fin este 2013 podamos encontrar sus cervezas de forma algo menos clandestina y comprobar que las buenas sensaciones no responden a  extrañas chiripas del mundo homebrewer, de lo cual estoy completamente seguro.
- Reptilian Marranada 2.0. Para mí, Mediona 2012 fueron muchas y muy buenas sensaciones, pero sin duda Isaac y esta pequeña joya en barrica me dejaron terriblemente enamorado.
- El Oso y el Cuervo Oso Negro. La última sorpresa del año vino en el BirraSegura, pero no por última es menos interesante. Una imperial stout muy bien hecha y alejada de las modas yankies imperantes. Habrá que seguir muy de cerca a estos hombretones toledanos.

 Parece mentira que esta bonita etiqueta haya pasado a mejor vida...

USA.

Aunque el número de elaboraciones probadas este año provenientes del otro lado ha sido menor, la calidad de algunas de ellas las sitúan sin duda entre algunas de las mejores cervezas que he probado en mi vida.

- Stone Ruination. Una auténtica bomba de lúpulo de la costa oeste estadounidense hecha cerveza.
- Lost Abbey Angel’s Share. Posiblemente una de las cinco mejores cervezas que probamos en todo el 2012. Un elixir de dioses o de ángeles… igualmente la cosa queda arriba…
- Founders Dirty Bastard. La cerveza que hizo replantear mi animadversión hacia las Scotch ales, una elaboración mucho más allá del simple alcohol y dulzor.
- The Bruery Fruet. Otro elixir al estilo de la citada Lost Abbey, también en barrica de Bourbon. Gentileza del buen colega Eric, venida en su maleta directamente desde los USA. Un locurón de cerveza.
- Alpine & New Belgium Lips of Faith Super IPA. Otro detalle de Eric para el evento de Zombier el pasado octubre en el Drunk Monk. La demostración de porqué los estadounidenses son unos ases al trabajar el lúpulo.
- Brooklyn Black Chocolate stout. Cuando vi que esta elaboración de apariencia tan humilde tenía un 100 en Ratebeer quedé realmente sorprendido. Tras probarla no puedo sino deciros que si la encontráis no dudéis en comprarla. Maravillosa.
- Sierra Nevada Celebration. Otra demostración más de que micro vs. macro no es más que una batallita de números que interesa a unos pocos. Buena cerveza es lo que importa y ésta lo es sobradamente.

 Qué gran fin de semana en buena compañía pasamos en el Drunk Monk.

Bélgica & Holanda.

Los clichés casi siempre son malos, y creer que estos países son aburridos y/o repetitivos es uno de ellos. Por suerte hay numerosas elaboraciones que demuestran lo contrario.

- De Dolle Boskeun. Las cervezas belgas estacionales son mucho más que una simple estrategia marketinera. Simplemente fantástica.
- Alvinne Land van Mortagne. Ver sus temibles 13,9% de alcohol escritos en la etiqueta asustan hasta el belgófilo más avezado. Lo maravilloso es comprobar lo bien compensados que están, entre otras muchas deliciosas razones.
- 3 Fonteinen Oude Kriek. La mejor lambic de frutas que he probado hasta el momento. ¿Hace falta decir algo más? ;)
- Cantillon Iris y Cantillon St. Lamvinus. Si no te gustan las cervezas espontáneas quizás éstas te cambien esa impresión. Para los demás, supongo que simplemente nombrar Cantillon será suficiente...
- De Molen. Elegir una sola elaboración de ésta prolífica y reputada cervecera es una tarea complicada. Me enamoró su Hemel & Aarde Bruichladdich, una imperial stout envejecida en barrica de whisky escocés, pero también SSS, otra imperial stout hecha recreando una antigua receta londinense de 1914 por el reconocido escritor Ron Pattinson.

¡I love Cantillon!

Alemania.

A paso lento pero firme, sin olvidar las buenas tradiciones, es como avanzan los teutones.

- Schneider Weisse Tap X Nelson Sauvin. Una sinergia magnífica entre la vieja y la nueva escuela, weissbiers y lúpulo de nueva generación. Deliciosa.
- Freigeist Deutscher Porter. Una elaboración que no deja indiferente a nadie, hecha con sal y con el toque “funk” del amigo Brett. Innovación a la alemana para emular un estilo ya perdido.
- Uerige Doppelsticke. Si la anterior era la originalidad, Uerige es la tradición y el buen hacer. Hasta probar ésta, las Alt no me habían llamado precisamente la atención pero esta delicia me dio una vuelta a la cabeza que aún dura. Un joyón.
- Ayinger Jahrhundert. Si en su momento la Celebrator, su doppelbock, me dejó alucinado, esta helles bock no se queda atrás. Un 10 de cerveza para repetir hasta el infinito… y más allá…

Juntar lúpulo neozelandés a una buena weiss bávara no podía salir mal.

Reino Unido

Influenciados cada vez más por la actual ola yanquie, los británicos no olvidan las buenas tradiciones, y eso se agradece.

- The Kernel – casi cualquier IPA o Pale ale de barril y muy fresca. No tengo palabras para describir el goce vivido con las cervezas de estos londinenses. Asombrosas, adictivas, sin nada que sobre ni nada que falte. Simplemente perfectas.
- The Kernel Export Stout London 1890. Como no sólo de lúpulo vive el hombre, esta botellita inspirada en una vieja receta nos enamoró desde el primer sorbo. Su diseño austero invita a concentrarse en su contenido, y con razón.
- Robinsons Old Tom. Una old ale de la vieja escuela. Infinitamente recomendable.
- St. Peters Winter ale. Hablar de St. Peters es hablar de una institución en U.K., pero hacerlo de una cerveza estacional no es lo más habitual. Sin duda esta winter ale me dejó fascinado.
- Fullers Past Masters Double Stout. Una stout realmente deliciosa hecha según una receta de finales del s.XIX me reafirma en lo interesante que es esta serie lanzada por Fullers.

 Estos londinenses son unos genios.

Italia & Francia

Nuestros vecinos del norte y del este llevan metidos en la vorágine artesana desde hace unos cuantos años antes que nosotros, y eso se nota.

- Toccalmatto Zona Cesarini (barril y botella). Esta maravilla elaborada con lúpulos que aportan recuerdos a fruta tropical tiene tanto de bien hecha como de adictiva, y en barril es algo demasiado. ¡¡Ufff!!
- B. del Ducato Verdi Black Jack. Una increíble imperial stout rebosante de notas aportadas por su paso por barrica de whisky Islay. Maravillosa.
- Baladin X Fumé 2006. Un cervezón de copa que pudimos disfrutar gracias al buen amigo Txema. Para beber a sorbos pequeños y paladearla lentamente.
- Birrificio Italiano Extra Hop(barril). Una pilsner terriblemente adictiva elaborada con cantidades ingentes de lúpulo Tettnanger fresco. Una delicia.
- Philomenn stout. En nuestro periplo por la Bretaña francesa hubo varias stout que nos gustaron mucho pero sin duda esta elaboración del norte bretón, con notas a turba y torrefactos fue la que más de todas, y con diferencia.
- Les Fous Mild (hand-pump). Aunque los cerveceros procedan de U.K. y de Irlanda, y todas sus cervezas tengan el sello brittish bien marcado, lo bien cierto es que este brewpub se sitúa en el corazón de la preciosa Bretaña francesa. De todas sus elaboraciones, esta mild tirada a en hand-pump fue la más grata revelación.

 Esta pequeña joya comprada hace algo más de un año en la tienda de Alvinne fue una deliciosa sorpresa.

Norte de Europa.

- Haandbryggeriet Odin’s Tipple. El perfecto ejemplo de porqué amo las cervezas oscuras, con cuerpo, y de textura cremosa elaboradas en los países nórdicos. Cada sorbo a esta imperial stout es como un chispazo al corazón.
- Amager Galanthus Nivalis. Otro elixir para dioses (y van unos cuantos a lo largo del post…). En este caso una barleywine envejecida 13 meses en barrica de porto. Lo peor, que se termine la botella.
- Nogne #500. Con ésta joya brindamos por San Lúpulo y quedamos absolutamente fascinados. Si todas las imperial IPA de color oscuro fueran tan buenas como ésta, habría muchas menos discusiones semánticas y estilísticas.

 - sobran las palabras -

Cajón de sastre.

Y no podían faltar unas pocas elaboraciones de algunos países sueltos pero que merecen una mención especial.

- Pilsner Urquell ed. 170 aniversario(barril) (R. Checa). Hay quien dice que beber esta pilsen sin filtrar ni pasteurizar en las instalaciones de la fábrica es toda una experiencia. De ello estoy seguro, pero la edición que sacaron este 2012 en barril y botella para conmemorar su 170 aniversario es sin duda algo también muy especial.
- BFM Cuvée Alex Le Rouge 2010 (Suiza). Una curiosa y muy compleja cerveza a caballo entre una imperial stout y una sour ale, elaborada con pimienta, vainilla, tabaco, lúpulo fresco… Muy pero que muy interesante.
- Zywiec Porter (Polonia). Una excelente baltic porter y en definitiva una gran cerveza hecha por una macro polaca. Abrirá los ojos a aquellos temerosos de las elaboraciones del oriente europeo.

 Jurassian I. Stout. Éstos suizos son unos ases haciendo birra pero tambien poniendo nombres.


Y esto es todo. El resultado final, un popurrí difícilmente catalogable: IPAs, I.stouts, belgas, ales británicas… Quizás el punto flaco hayan sido las pocas representantes centroeuropeas, pero intentaremos mejorar en este 2013 que tan negro nos quieren pintar algunos. ¡A todos vosotros, que este año os depare mucha y muy buena cerveza!

Resumen del año 2012 en el blog.



Recién empezado el año y antes de proseguir con la marcha habitual del blog es momento de hacer balance de lo que ha dado de sí este 2012 en el blog. A continuación tenéis algunas de las entradas que más aceptación o relevancia tuvieron, ordenadas por meses.


Empezamos en enero , mes en el que entrevistamos a alguien que admiro profundamente, Sven de la cervecería The Drunk Monk. Tras detallar algunos de nuestros regalos de “Reyes” y continuar con una receta de cocina, lanzamos a la palestra una nueva sección, las Reflexiones de un Hophead, que daría mucho de sí en los meses siguientes. Ésta empezó con una entrada en la que hablamos de algunos aspectos que rodean a la cerveza y que en ocasiones nos distrae de lo verdaderamente importante. Os detallamos el descubrimiento de un verdadero edén de la cerveza en La Nucía, Alicante, y finalizamos con una mezcolanza de dos de mis pasiones: la cervezay el manga.



El febrero lo empezamos hablando de doselaboraciones de Naparbier, microcervecera que a razón de las cuales empezó a dar un nuevo rumbo con auténticas joyas. Seguimos con un cómic de Emily Sauter y con el anuncio de una de las cervezas que se podrían encontrar en el BBF. Llegó el turno de las Reflexiones de un Hophead hablando de unas cervezas artesanas de origen un tanto esquivo y continuamos con otra receta de cocina maridada con una de las mejores cervezas de todo el 2012. Finalmente nos fuimos todos juntos de viaje cervecero virtual.



El pistoletazo de salida en marzo lo marcó una entrada histórica en cuanto a visitas y sobretodo comentarios, superando por primera vez la barrera de los 100, y en la cual hablamos de Ratebeer y las páginas de valoración de cervezas en general. También nos adentramos en el interesante mundo de la coctelería hecha con cerveza, y proseguimos con un cóctel explosivo en el que mezclamos Fallas, San Patricio y el BBF. En este mes nació otra sección, Estilos Históricos, para hablaros de las particularidades de aquellos estilos prácticamente extintos o ya pretéritos y el primer post vino de la mano de las teutonas Lichtenhainer. Y para rematar, nos acercamos a los growlers de cerveza, un mundo con más historia detrás de la aparente.



Tras un mes tan intenso llegó abril y para abrir boca llegó Baird Beer con un post etiquetero japo-estadounidense. Seguidamente nos volvimos a adentrar en la historia, en este caso de lasAltbier. Os hablamos del Barcade, un maravilloso bar de Brooklyn, con el que de paso lanzamos una nueva sección llamada “Bares, qué lugares”,  aunque por desgracia a ésta última no le dimos más continuidad durante el resto del año. Nos sumergimos en el mundo del diseño con un concurso de copas de la conocida cervecera belga Duvel, . A mediados de mes por fin pudimos estrenar La Torxa en Alzira, un local que se sumaba a su tocayo en Benifaió, también llevado por Victor. Redondeando el mes también publicamos dos entradas (ésta y ésta) referentes a la primera feria de cerveza artesanal en Benissa y en definitiva de Alicante.



El mes de mayo tuvo mucho calor en todos los sentidos. En primer lugar vino otra edición de los estilos históricos, las Steinbier y antes de alcanzar el punto más álgido de temperatura hablamos de las cervezasdel este europeo. Y entonces llegó la hora del post más polémico del año entre las Reflexiones de un Hophead, la famosa “burbuja de la cerveza”. Con ésta marcamos el record histórico del blog en cuanto a comentarios y me gané unas cuantas enemistades, aunque por otra parte ya me lo temía y no me arrepiento en absoluto de haberla escrito. Varias ferias después, eso sí, numerosos elaboradores aún se acuerdan de mí por ese post… Relajamos la cosa con una saison de color muy peculiar y nos unimos a la primera edición de una genial idea del amigo Birraire: el FFdA.

Aunque "la burbuja" dio mucho de sí, me quedo con el buen rollo del FFdA.

Con un mes tan “calentito” como el anterior entramos en junio, cómo no podía ser de otro modo, con dos festivales cerveceros. El primero, l’Aplec de Benissa, con dos posts: la correspondiente crónica y las conclusiones. El segundo fue la VII edición de Mediona, otra vez con su correspondiente crónica  y las conclusiones. Regresamos a los estilos históricos con las Gose, pero esta vez con doble ración (aquí la primera entrada y aquí la segunda), para terminar con una entrada de las etiquetas de Amiata, cervecera italiana de aspecto aparentemente inocentón pero cuyo contenido demuestra precisamente lo contrario.



Julio fue el mes en que descubrimos un pedacito de Polonia en Castellón y tuvo lugar la segunda quedada virtual en pocos meses, nuevamente ofrecida por el amigo Birraire, llamada Mis Cervezas Veraniegas. Tuvimos tiempo de elegir un nombre para una elaboración de DeMolen en colaboración con la tienda online Zombier y nos fuimos a la Alemania más playera y valenciana, en pleno corazón de Cullera. Terminamos con un post curioso, hablando de la resaca cervecera.



Agosto tuvo un claro protagonista, pero antes de ello dio tiempo para hablar de una curiosa propuesta de la estadounidense Elysian, la cual se propuso lanzar una cerveza cada mes hasta el pasado diciembre, para celebrar así el fin del mundo. Pero como anticipaba, este mes estuvo copado con las entradas de nuestro viaje por la Bretaña francesa. Aquí os dejo las entradas para posibles despistados: 1, 2, 3, 4 y 5.

La Bretaña, región minúscula pero repleta de cervezas.

Con la última entrada de nuestro periplo bretón (6) y nuestro relato por la Pamplona más cervecil, volvimos a entrar en septiembre y con él a la rutina. Cayeron dos entradas de Laugar, unos chicos con muchas ganas de fiesta pero muy serios a la hora de elaborar cerveza: primero una entrevista y luego hablamos de algunas de sus cervezas. A finales de mes las etiquetas de la oktoberfest inundaron el blog para cerrar con una entrada en la que os hablé de mi intensa pero corta historia en este mundo de la cerveza.



Octubre fue un mes intenso y repleto de celebraciones. Primero vino una entrevista a Manuel Baltasar, más conocido como Manolo, la cabeza más visible del Freiburg de l’Hospitalet de Llobregat. Celebramos nuestra particular Oktoberfest, e hicimos nuestra particular ofrenda al Santo Lúpulo. También os hablamos de las variaciones existentes de la Struise Black Albert y nos fuimos al Drunk Monk en Mataró para la celebración de Zombier por su primer aniversario como tienda.



Noviembre fue otro mes intenso. Seguimos con nuestras crónicas del fin de semana de Zombier en el Freiburg y la segunda parte en el Drunk Monk. Visitamos el flamante brewpub de los amigos de La Sènia y entrevistamos a Joan Montasell, cabeza pensante y actuante de Birralta Homebrewing . También tuvimos tiempo para visitar Quality Beers, una nueva tienda en Valencia, y terminar con un segundo, y más intenso, FFdA.



Y llegó diciembre y con él cerramos el año. Primero cumplimos nuestro 3er aniversario como blog para seguidamente hablaros de dos tiendas: una física, Solo Cervezas en Alzira, y una online, Biirkonnen. Acercándose las navidades algunos de los mejores bares de la península nos contaron cuales serían sus referencias navideñas e invernales y adornamos las fiestas con varias curiosidades de las etiquetas navideñasde algunas cerveceras. Publicamos nuestra crónica sobre el Birra Segura, una feria de cervezas artesanas en Sant Joan d’Alacant y en la que volvimos a ejercer de organizadores, y brindamos todos juntos por un fin del mundo que se finalmente no lo fue. Y para concluir os deseamos felices fiestas además de comentaros nuestras compras navideñas.


El año terminó muy animado con el Birra Segura y  sobretodo con el supuesto fin del mundo.

 



Y así termina el 2012. Algo más de 100 entradas, muchas, muchísimas cervezas bebidas, pero sobretodo nuevas amistades y muy buenos ratos pasados. Muchísimas gracias a todos los que habéis estado ahí entrada tras entrada y esperemos que el 2013 que hoy recién empieza dé tanto de sí o incluso más. También deseamos que sigáis estando ahí, ya que el disfrute si es en compañía siempre es mucho mayor. Feliz año nuevo a todos.

En unos días publicaremos las mejores cervezas que han desfilado por nuestras gargantas a lo largo del 2012.

¡¡Felices fiestas!!


Aunque espero que tal día como hoy tengáis muchas y muy buenas razones para no estar aquí leyendo, he decidido lanzar igualmente este post para los que como un servidor no dejan el teclado de lado ni en los días de fiesta, así como también para todos aquellos que podáis leerlo a lo largo de las navidades. Tanto para unos como para otros,desde aquí os dedicamos fervientemente que tengáis unas felices fiestas y que empecéis el 2013 con mucha ilusión y con tanta o más cerveza que al empezar el 2012.


Como viene siendo tradición por estas fechas, aquí abajo os dejamos las cervezas de navidad e inverno que hemos podido conseguir este año. Creo que se nos ha vuelto a ir de las manos… ;)



 Anchor y Samuel Adams (USA) y Dieu Du Ciel (Canadá).
 
 Desde Noruega varias Lervig y Haandbryggeriet, y una tricolaboración entre Nogne y las estadounidenses Stone y Jolly Pumpkin.

 Popurrí de europeas: Leikeim, Aktien y Schlenkerla (Alemania), Samuel Smith (UK), BFM (Suiza) y las locales Agullons y Dougall’s.

 ¿Se nota que nos mola De Struise? La Tsjeeses de este año, la de 2010 envejecida en botella 2 años y las versiones con barricas (Porto y Bourbon).

No podían faltar más desde Bélgica (St. Feuillien, Serafijn, Petrus y Vicaris) y Holanda (Emelisse).


¡Bon nadal! ¡Felices fiestas! ¡Gabon zoriontsuak! ¡Bo nadal!

Brindando juntos con la última copa.


Hoy estamos a 20 de diciembre y según parece predecir el calendario de los mayas, mañana es el fin del mundo. Curémonos en salud y por si pudiera ser cierto os propongo que elijamos una última copa con la que irnos un poco más contentos al otro lado.


Ésta es la pregunta que les hice a unos cuantos amigos y gentes conocidas del mundillo:

Suponiendo que pudieras tomar cualquier cerveza, desde la más común a la más rara y cara, ¿cuál elegirías y por qué razón?


A continuación sus respuestas (por orden alfabético para que nadie se me enfade…).

Alberto (Cantillon, Bélgica). Considero a Jean Van Roy (Cantillon) y a Vinnie Cilurzo (Russian River) los mejores elaboradores del mundo, no solamente porque hacen cervezas excelentes sino por el nivel humano y por su ética. Así que sin pensarlo mucho las elegidas serían una Cantillon Cuvée Saint Gilles y una Russian River Supplication.


Andrés (Cervecería Lúpulo Feroz, Oviedo). Hace unos años hubiera dicho Orval sin dudarlo ni un segundo. Con la perspectiva del tiempo y con la experiencia adquirida, aún siendo Orval una cerveza extraordinaria y aún estando entre mis favoritas, y como tengo que dejar para nochebuena una Marina Grimm North que tengo enfriando en la nevera desde hace meses (obviamente no pienso ni por un segundo que se va a acabar el mundo el día 21 -me tiene que tocar la lotería el 22), me gustaría volver a tomar la primera Hemel&Aarde de De Molen que disfruté hace ya años. La que venía con su sello de cera y su numeración de serie limitada. Una cerveza que me dejó marcado y que me hizo valorar lo que es un producto pensado para tomar muuuuuuuuuuuuuy despacio, dejando que coja la temperatura adecuada y disfrutando de los últimos momentos de que dispongamos.

Antonio Bravo (Ilustrador, Málaga). Si tuviera que elegir, por un lado estaría Stone Ruination. La bebería en la soledad reflexionando sobre el inexistente futuro. En segundo lugar elegiría la Green Flash Hop Head Red ale, para disfrutarla con gente en un ambiente totalmente decadente. Son hasta el momento las cervezas que más me han gustado de todo lo que he probado.


Biirkonnen (tienda online, Alicante). Aine. Seguro que el fin del mundo son todo inventos, pero sinceramente, si tiene que ser algo, espero que sea un Apocalipsis zombie. Y lo primero es ambientar la situación, siento alargarlo más pero es que a todo tengo que ponerle una BSO... Con un casco alemán en la cabeza (mi cerebro protegido ante todo) de fondo suena la canción "Abesses" (Birdy Nam Nam) mientras voy conduciendo tranquilamente mi Hummer color amarillo (lo mejor para camuflar la sangre), recubierto de cuchillas y cuchillos largos y bien afilados; en el techo hay instaladas 4 ballestas (norte, sur, este y oeste), y a mano nunca vienen mal un par de bazookas. Al lado de mi R2D2 (el mejor ataque siempre es una buena defensa) tengo las armas para la batalla cuerpo a cuerpo (por lo que pueda pasar): una katana, una espada espartana, y por ultimo varios lanzallamas y un par de guantes estilo Freddy Krueger (es un todo en uno, matar y cocinar xD)... Llegó la hora de la acción (Wait and Bleed – Slipknot), jugar sin simuladores al "Carmaggedon" (ñiejñiejñiej -risa maliciosa-). Geroooooooooonimooooooooooo!!!!! Por supuesto, (Twisted Nerve –Bernard Herrmann) no me iba a olvidar de regar toda esta historia y dar el ultimo suspiro con una "Black Berry Albert" o una "Rio Reserva" de Struise, me parecería llegar al Nirvana.

Biirkonnen (tienda online, Alicante). Jota. Como estas cosas siempre acaban, empiezan o transcurren con una confrontación entre el bien y el mal; por si acaso me echaría al cuerpo una Yin&Yang de EvilTwin para observar con tranquilidad los últimos segundos de un horizonte humeante dónde se dibuja un avestruz dorado (nótese el guiño Struise) de polvo ascendiente.. ¡oh no! Aaggghhh!!! es el Hummer de Aine ... slash, ñaaackk, chofff!!

Brian Strumke (Stillwater, USA). Te diría Alchemist Heady Topper y Stillwater Premium. Ésta última porque se ha convertido en mi cerveza para el día a día. Nunca me canso de ella… En cuanto a la Heady Topper no es sólo la mejor IPA, sino una de las mejores cervezas del planeta! Lo malo es que tiene 8% y no la puedo beber todos los días…


Bruno (Maestro cervecero de Toccalmatto, Italia). En primer lugar elegiría Cantillon Lou Pepe, una combinación perfecta entre acidez, “drinkability” y frutosidad. La otra sería Firestone Walker Parabola, una de las mejores cervezas que he probado este año, y aunque no me gustan mucho las Imperial stouts con mucho cuerpo y dulzonas esta es perfecta. Me gustan mucho todas las cervezas que he podido probar de esta gente, es más, creo que Matt Brynildson, el maestro cervecero, es uno de los mejores del mundo.


Carlo (De Struise, Bélgica). Una pregunta difícil… de todos modos voy a ser un tanto chauvinista por esta vez ;). Elegiría una Pannepot Grand Reserva porque es la cerveza que más se acerca a mis raíces. Si tuviera suficiente tiempo el día del Apocalipsis encendería un buen fuego y disfrutaría de una PGR bien añejada, un gran acompañamiento para reflexionar sobre mi corta vida. Aunque espero que los Mayas estén equivocados y en ese caso me alegraré de beber una simple Heineken,ni que sea por una vez. ;-)

Chela (Cocineru & CAAC & Beer Bon Bebant). Si viniera el fin del puto mundo la verdad es que estaría más tiempo haciendo el amor con mi chica que bebiendo cerveza aunque para engrasar la cosa unas cuantas TT Landlord pale ale o unas Deuchar's IPA de Caledonian no estarían de más y de paso haría homenaje a mis tiempos en UK. Para despedirme de la familia pues brindaría a tope con unas buenas Chimay azul y con los amigos imagino que tomaríamos cerveza de casa, Cotoya y Caleya aunque si te soy sincero no podría dejar este mundo sin echar al coleto una caja de sidra, a poder ser de lo del Santu de Llagares Canal jejeje. Entre amigos, ahí la tierra llama a la tierra jejejeje. Haya Salud y que no nos caiga el cielo sobre nuestras cabezas todavía.


Dani (CerveTV). Creo que bebería una Zinnebir de la Brasserie de la Senne. Fue la cerveza con la que bautizamos (aquí el video) a mi primera hija en la Cerveteca (BCN) y siempre le he tenido mucho cariño aunque ahora tal vez haya otras que me gusten más.

Gabriel (Zombier, Málaga). Tendría varias y por distintos motivos. Yo me prepararía una cenita de despedida con Three Floyds Dark Lord (o una cata vertical con las de varios años distintos), tendría varias cogidas de la bodega privada de Kris de DeDolle con algunas Stille Nacht de los ‘80/’90 y no podría faltar alguna de las cervezas raras que hace Struise y no saca al mercado. Una Pliny The Younger de Russian River tampoco podría faltar en la mesa.


Marya (Zombier, Málaga). ¡¡Uff!! Pues una seguro que sería la Oerbier, es el mejor antidepresivo que conozco, y además, por su valor sentimental, ya que hemos pasado muy buenos ratos con Chris y Elsa en Esen. Luego, si empiezo por Oerbier puedo acabar con cualquier barbaridad... depende de a qué hora del día 21 acabe el mundo. A partir de ahí sacaría alguna de esas reliquias que tiene Gabriel en la bodeguita, de esas que justamente hace falta un fin del mundo para que las abra.

Isaac (Reptilian, El Vendrell). Recientemente, en el Drunk Monk, me enamoré de la Thomas Hardy Reserva 1992 (y eso que solamente me dieron a probar un pequeño sorbo). También podría decir una Tsarina Esra de De Molen. o una que estoy tomando ahora mismo, la Molotov Cocktail, una imperial Ipa de EvilTwin. Pero si quieres una que no he probado y le tenga ganas… pues quizás la Pliny the Elder de Russian River, o la 120 minutes de Dogfish Head, o la... Conclusión: para el 20 de diciembre me traes una caja de cada y nos las pimplamos. Y si se tiene que terminar el mundo, pues que se acabe. Ah, y las razones, pues porque supongo que es mejor todo lo que te he dicho que no una Heineken…


Ivan (5 Titius, Olot). Hay muchas cervezas que me vienen a la mente y que podrían ser la última. Sobretodo muchas que no he podido probar nunca, aunque éstas las descarto porque solo faltaría que me decepcionaran y la última cerveza fuese una mierda… eso si que sería la muerte!!!! Así que me decido por una que me gusta mucho y que es realmente especial, muy difícil de conseguir y aún no he probado. Dentro del Bunker de DeDolle, entre polvo, telarañas y añadas viejas, tomaría una Oerbier Reserva 2004. Creo que es de las primeras con 13% que hicieron. Sería una muerte, dulce, ácida, vinosa y larga.


Joan Montasell (Birralta, Sant Cebrià de Vallalta). Sin pensármelo dos veces creo que me tomaría la Klokke Roeland, una cerveza buenísima de 11% alc., los cuales ni se notan! ¿La razón? Porque me hice “muy amigo” de esta cerveza en el bar de cervezas Bierhuis de Gante (Bélgica). Me trae muchos recuerdos de mi estancia en esta ciudad. Que más que recordar los buenos momentos mientras se acaba todo!

John (De Molen, Holanda). Celebrar el fin de los tiempos con una sola cerveza… Si fuera una De Molen sería mucho más fácil: Vuur & Vlam o Tsarina Esra Reserva por ejemplo. En caso de beber una sola: The Kernel Imperial Brown Stout London 1856. Sencillamente increíble. Si tuviera 7 días de fiesta me gustaría sobrevivir hasta el último segundo y en ese caso elegiría Närke Double Dutch Viking, una ale de sesión perfecta. Podría tomar muchas pintas de ella.


Juan (Naparbier, Pamplona). Posiblemente te diría alguna Cantillon pero creo que me voy a inclinar por la Nogne Red Horizon, aparte de que me parece una cerveza espectacular y diferente, es lo mejor que he bebido con una graduación tan alta. Por otro lado, es la ultima cerveza que bebí con Robert Merryman antes de su marcha a los E.E.U.U.

Kevin i Pep (Cervesa Marina, Blanes). Seguramente una buena IPA, amarga, sabrosa y aromática, por aquello de que aguantan las inclemencias de los largos “viajes”, pero lo realmente importante seria poderla tomar acompañado de las personas que realmente te importan.... La elección, pues barriendo un poco para casa sería The Grim North Black IPA.


Laugar (Microcerveceros y alma de toda buena fiesta cervecera que se precie). Temido día por unos y esperado día por otros. Como si del efecto 2000 se tratara y Terminator pasara de ciencia ficción a realidad. Nadie sabe que pasará pero como se suele decir más vale un por si a caso... Está claro que no podía ser de otra manera que con cerveza especial para un día especial, con lo que hemos decidido prepararnos para tal fecha con un ritual pagano para salvaguardar nuestras almas al estilo Laugar, y es que tras la masiva y continuada ingesta de cervezas saciadas con maíz, arroz y demás elementos indignos intentaríamos redimirnos antes de este ultimo viaje. Antes de nada hay que preparar el entorno. Estando en la misma costa que mejor lugar que alrededor de una hoguera en una playa del Mar Cantábrico con el sonido del mar de fondo. Después de haber elegido el entorno debemos centrarnos en nuestro cometido. Elegir el recipiente adecuado es fundamental, en nuestro caso una gran palangana (con símbolo de plástico alimentario, ante todo seguridad), para los más sibaritas el inox AISI 304 por lo menos. Tenemos el continente, pero difícil decisión la del contenido. ¿Una cerveza únicamente?, ¿Un solo estilo? ¡No! Que somos 5. Mejor haremos un blending, ¿no era algo especial?, ¡Pues ya está! Aportando frescura, punch y buena lupulización al blending tenemos la Hercules doble IPA (así cogemos color a marciano, así como verde). Para agudizar el gusto ácido tenemos la Hanssen Oude Gueuze. Como también habrá que comer algo para no esperar en vacío, añadiremos la Kulmbacher eisbock, un poco de pan liquido con extra de ABV. Toda gran reunión viene acompañada de un gran postre y café, para eso tenemos Mocha Bomb y Dark Lord (si no querías taza, pues taza y media). Ya tenemos todo preparado para comenzar el ritual. A las 22:00 hora zulu, cada uno deberá confesar todos sus pecados al mismo tiempo que añade una de las cervezas escogidas. Entre ellos tendremos muchos en común, ¡Si! Yo también tome arroz y maíz, ¡Juro no volver a hacerlo!. A su vez, y con la canción SACRIFICIO de los Mojinos Escozios de fondo, desollaríamos una Cobaya con nuestro molino Cortina… Ahora solo quedar esperar y venga lo que venga rodeados de grandes amigos y familiares, esperemos poder haberos ayudado a que la espera sea más agradable. P.D: añadir además que nuestra cámara funeraria estaría repleta de keykegs de las cervezas anteriores, un taptrailer y un CD de Siniestro Total, para que tanto el hipotético viaje como nuestra presencia en ese más allá sean plenos


Manuel Baltasar (Cervecería Freiburg, l’Hospitalet de Llobregat). Yo sin duda una Great Divide Yeti Espresso Oak Aged, ¡¡pero vamos, hasta reventar!! Es la única cerveza que me da un subidon, el aroma, su sabor… ¡¡Todo, todo y todo!! Parezco la niña del anuncio de seguros de Catalana Occidente, jajajaja!!


Raúl Benages (Bevirra, l’Hospitalet de Llobregat). Si pudiera elegir sería una Allagash Victor Francestein, hecha con uva fermentada con levadura de vino y después madurada en barrica de roble con más uva durante un año, o Ommegang Three Philosophers, una belgian strong ale hecha en blend con Liefmans Kriek. Por poner alguna de aquí, Marina Grimm North. ¿De mi estancia en Italia? Cualquiera de Birra del Borgo (me recuerdan a los festivales de cerveza de Turín), Rurale (me recuerdan a la única tienda especializada de la misma ciudad), Chocarrubica de Grado Plato (una birra con cacao que se hace en un brewpub cerca de Turín, en cuyo pueblo casi me pierdo). ¿Más cervezas que me traen recuerdos? Pues quizás la Mikkeller Black, que la probé por primera vez cuando estaba arreglando mi habitación en un piso compartido, o la Val-Dieu Grand Cru, primera cerveza que mi chica me quitó de las manos (antes no quería más que cosas light y ahora quiere belgas fuertes)… Por último, creo que te diría las 6 variedades de Black Hole en barrica de Mikkeller, que pude probar con Álvaro Petróleos, una gozada! Bueno, y creo que ya va bien, ¿no?

Robert Merryman (Shelton Brothers, USA). Me quedaría con Anchor Porter, en botella y en buenas condiciones. Hace más de 20 años esta cerveza (entre otras) me abrió las puertas al mundo de la cerveza artesana. Siempre recordaré como era y si tuviera que tomar la última querría esta. Define para mí cómo eran las artesanas americanas al principio, es nostalgia líquida.


Rosana (compañera de faenas blogueras y vitales). Pues supongo que elegiría una cerveza que no hubiera probado aún, ya que una conocida me traería demasiados recuerdos y seria un final muy melodramático ;). Si ese día estoy en casa y veo acercarse un meteorito o algo por el estilo iré a tu armario-almacén cervecero y me beberé cualquier cosa que encuentre, a partir de la tercera o cuarta fila, ya me entiendes, en ese fondo, fondo, muy fondo de armario ;-).  Otra opción seria pillar cuanto antes un billete de avión para Alemania ya que después de tus posts sobre estilos históricos no puedo morir sin probar alguno de ellos. Por ejemplo esa Bayerischer Bahnhof Original Leipziger Gose o la Wöllnitzer Weißbier recreación de la última lichtenhainer teutona serian una buena opción para saciar mi curiosidad...


Steve Huxley (elaborador). El concepto de Apocalipsis es común a muchas culturas, pero creo que prefiero su significado original: revelación. Estoy a punto de elaborar una cerveza en colaboración con Fort que será un intento de replicar la cerveza que había ocupado mucha de mi atención en la Barcelona Beer Company. Allí se llamaba 3 Graces Bitter y en su actual encarnación se llamará Steve’s Fort Barcelona Ordinary Bitter. Espero que por el día 21 diciembre esté en condiciones óptimas y sea una revelación. Creo que por estas fechas estaré bebiendo esto. No se si será la última cerveza que bebo, más bien creo que será la primera de muchas que se beberán como si no existiese la mañana. Para los que creen literalmente en la profecía Maya recomiendo La Fin du Monde, de Unibroue; es canadiense pero es tipo Tripel y contiene azúcar candi. Si te has equivocado corres el riesgo de empezar el primer día del resto de tu vida con una resaca.

Sven Bosch (Drunk Monk, Mataró). Si fuera el último día de mi vida y en lugar de estar en el Caribe quisiera beber una cerveza seria la 3 Fonteinen Schaerbeekse Kriek, por su color rojo-rubí intenso, por su aroma y sobretodo por su gusto amargo, ácido, una explosión de acidez en boca que consigue que te olvides de todos tus males y problemas. Es un auténtico elixir de juventud.


Jenny (camarera Drunk Monk). Seguramente seria una Struise Black Albert, porque me trae buenos recuerdos de un viaje a Bélgica con el equipo del Drunk Monk cuando fuimos al Zythos. Con la Black Albert di por finalizado un día dedicado a beber cerveza en buena compañía y terminé la noche muy a gusto en un bareto de Amberes… jajaja!

Dunia (camarera Drunk Monk). Yo me bebería una Sink de Bismarck por diferentes motivos. En primer lugar porqué el precio que vale esa botella no se paga cualquier día, pero si el mundo se acaba.. ¿que más da el dinero? En segundo lugar porque he tenido la suerte de probarla y creo que tiene un sabor muy especial, ya que es muy lupulizada pero a la vez adquiere un tono como de licor, con lo cual beberla se convierte en un buen rato con una copa en la mano; una copa especial y llena de un sabor distinto. Y en tercer y último lugar, la bebería porque con la graduación alcohólica pillaría tal pedo que me daría absolutamente igual que se acabara el mundo!


Víctor (Cervecería La Torxa, Benifaió). Sería y además sin ningún tipo de duda, la Sink The Bismarck de BrewDog, para quedarme K.O.!!!




Y no creeríais que iba a cerrar el post sin mi particular elección… Pues aunque estoy aún abrumado por la Birrificio Italiano Extra Hop que pude descubrir hace tan solo 3 días de barril y muy cerca de casa (una pils con tan solo 4,8% de alcohol, rebosante de kilos de lúpulos Tettnanger y tan bebible que no pararía de tomarla hasta reventar), si pudiera tomar algo con la pausa suficiente sin duda querría probar las cuatro variedades de 3 Fonteinen Armand’4 Oude Gueuze, y así irme bien a gusto con su maravillosa acidez al otro lado.




Así que ya habéis escuchado las respuestas de algunos amigos y conocidos. ¿Y vosotros con cuáles os quedaríais? Venga, soñemos despiertos todos juntos, que faltan menos de 16 horas que termine el día…

P.D. Todas las fotos las he sacado de la red y por lo tanto tienen sus respectivos derechos de autor.