Piqué, 100 partidos con el Barça


Regresó al club de su vida sin hacer mucho ruido ni obligarlo a acometer una inversión astronómica por recuperarlo. El Manchester United sólo ingresó cinco millones de euros en en julio de 2008 y nueve meses después ya se había gestado un tal 'Piquenbauer' que agotaba los calificativos para definir una evolución tan rápida muy difícil de imaginar cuando regresó a Can Barça seis años después. Hoy, a pocas horas de celebrar su centenario en el primer equipo azulgrana siempre que Pep Guardiola no le deje en el banco contra el Sporting, Gerard Piqué disfruta de la vitola de indiscutible en una defensa que lidera y comparte con su maestro Carles Puyol.

En su primera temporada, ya finalizó en el quinto lugar del ránking de minutos sólo superado por Alves, Valdés, Xavi y Eto'o y fue titular en 44 de los 45 partidos que disputó amén de marcar un gol en cada una de las tres competiciones en el camino al triplete. La pasada campaña elevó su participación a 49 encuentros logrando cuatro tantos, dos de ellos en la Champions ante el Inter: uno en la liguilla y otro en la dramática semifinal. Y en la actual, va camino de superarse. Sólo se ha perdido la ida de la Supercopa tras el injustificable 'bolo' que la selección jugó tres días antes en México y en la Liga no ha descansado ni un minuto, como Valdés y Maxwell.

A sus 23 años, su recorrido en el club es infinito sin que se le conozca techo alguno. Aún le queda para llegar a los 548 partidos de Migueli y los 491 que lleva Puyol pero si sigue igual, ambos registros correrán serio peligro. Como en el caso de otro campeón del mundo como Sergio Busquets, cuanto más juega, más deja con la boca abierta a culés y no culés por su personalidad y enorme trascendencia en el mejor equipo del planeta. El partidazo que firmó Piqué el pasado domingo en el Vicente Calderón define su madurez futbolística y supone un compendio de las virtudes que garantiza en la defensa, la medular y el ataque. Gerard es un 'tres en uno': gobierna la zaga con una autoridad insultante, rompe la presión conduciendo el balón a su paso por la divisoria con una jerarquía que recuerda a una leyenda como Franz Beckenbauer y empieza a gustarse en el área rival. Autor de un golazo (el octavo en 99 presencias) ante el Atlético tras un magistral control con el pecho, ha pasado a ser algo más que un recurso a la desesperada 'estilo Alexanko' para actuar de '9'.

Y cuatro años en Primera
Piqué festejará además este viernes el cuarto aniversario de su debut en la Liga. Lo hizo en Vila-real (3-2) marcando con el Real Zaragoza de Víctor Fernández