Para volvernos a ver

Me he pasado unos días un poco regular. Parece que mi cuerpo vuelve a componerse, pero todavía tengo el estómago un poco del revés. Debe ser que me han cogido cariño los virus.
Fui el otro día al médico a que me mandase beber Aquarius y tomarme gelocatiles 3 veces al día, a mí me recordó a lo de las 5 piezas de fruta/verdura. No sé si lo arreglará todo así, pero sólo puedo decir que a mí no me funcionado. Que llevo una semana así!
Por no hablar de lo que me fastidió ver qué mal empleado está el dinerito que nos restan de la nómina todos los meses... Me he cambiado de centro de salud y me dice la tía que le cuente que para ella soy nueva, y le pregunto si todas esas cosas no están en mi historia clínica y me dice que no la tiene, que vaya yo a por ella al otro centro de salud!!! No sé si se la tengo que llevar en un diskette o en una carpeta, supongo que mi antigua doctora guardaba todo lo que me preguntaba en un archivo .doc en "c:/Mis historias clínicas". Por favor!!!

Por cierto, Vaya timo de año, no me parece bien que no cambien las fiestas que caen a sábado ni que el sábado se considere día laborable, si yo no trabajo por convenio los sábados, que no me digan que no me cambian la fiesta porque el sábado es laborable!! Bueno, no me voy a quejar mucho, que no puedo decir que mi semana laboral haya sido muy larga.

A veces parece que el ipod se influya por motivos externos. Quizá le afecten a él más que a mí. Ya he dicho que nadie impone los ritmos a mis sentimientos, ni siquiera las cadenas de televisión monotemáticas, ni las colas interminables, ni los atascos, ni las flores. El caso es que ayer mi ipod enganchó dos canciones seguidas que me hicieron decir "si es que hay que joderse", ahí van las dos, en el mismo orden en que las quiso poner el aleatorio del ipod. Hoy otros eligen la música por mí.

Quién tuviera fé en cada poro de la piel
Deluxe



Incluso en estos tiempos
triviales como un baile de disfraces,
todos los días tienen unas horas
para gritar al filo de la aurora,
la falta que me haces.
Sabina



(que las canciones están para que cada uno la entienda según lo que siente)

Viendo amanecer

No sudé toda la tristeza, pero sí una buena parta de la angustia.

Se me había olvidado por qué me gustaba el spinning. PA PA PA y todos tus problemas se reducen a marcar el ritmo con la pierna: PA pierna derecha abajo, PA pierna derecha abajo, PA pierna derecha abajo. Ahora más rápido PA-PA-PA.

Salí nueva, aunque el dolor en la rodilla derecha todavía me dura.

El jueves no estuvo mal, recordé también por qué me gusta este trabajo, es curioso que lo recuerde cuando tenemos una movida que no hay por dónde cogerla.

Y por lo demás ... me siento mejor, me siento contenta hoy, mira tú. Será porque es viernes. Sé que no está solucionado, que en el fondo es como barrer y meter la porquería debajo de la alfombra. Habrá que utilizar parte del fin de semana desempolvando.

El sol, el sol sale para todos
el sol sale para todos
y para todos se oculta también.
Si, ay, si te quedas
si te quedas un rato esperando
verás que vuelve a amanecer.

Deluxe

Feliz fin de semana




Lo que el sueño nos dejó

Me he levantado con el mismo dolor de cabeza con el que me acosté ayer. No siempre se lo lleva todo la noche.
Siempre me cuesta ponerme en marcha por la mañana, necesito un periodo de adaptación, no puedo mantener una conversación hasta después de desayunar. Sin embargo esta mañana no he tardado más de 30 segundos en recordar cómo me acosté ayer. La misma sensación me ha acompañado desde primera hora y no parece que se vaya a separar de mí en lo que queda de día.

Me voy a ver si hago un poco de deporte, a ver si sudo la triteza.




A ti te estoy hablando, a ti,
que nunca sigues mis consejos,

a ti te estoy gritando, a ti,
que estás metido en mi pellejo,

a ti que estás llorando ahí,
al otro lado del espejo,

a ti que no te debo,
más que el empujón de anoche

que me llevó a escribir esta canción.

Sabina

Y ser como el sol de otoño

No me muevo por ritmos impuestos, ni siquiera a los que me impongo yo misma. El caso es que yo ahora tendría que estar supermegahipermotivada laboralmente hablando, debería estar dejándome los cuernos porque toca, porque nadie se acuerda de nada, sólo de los últimos meses. Sin embargo… llevo una temporada con una pereza encima que no es normal, que me cuesta arrancar por las mañanas y que me hace arrastrar las horas una detrás de otra, viendo que no avanzo, viendo que salto de una cosa a otra sin terminar nada.
Me he dedicado a analizarlo, creo que en parte es culpa de mi jefa, que trabaja demasiado y no me termina de involucrar, pero puede ser que también sea miedo por mi parte, y si después descubro que no sé hacerlo, y si lo consigo y me veo con crisis nerviosas cada día cuando venga a trabajar… y si no lo consigo.
No entiendo lo que me pasa, a mí me fascinaba mi trabajo, es por eso por lo que sigo aquí, es por lo que he aguantado mucho de lo que aguanté, porque realmente disfrutaba con ello. No sé a qué viene este miedo, creo que soy buena en lo que hago (siento que suene un poco prepotente, decir otra cosa sería falsa modestia que me repatea) pero no puedo evitar sentirme un poco bloqueada.

El otro día estuve con mis antiguas compañeras de la facultad, y me dio por pensar cómo ha cambiado todo desde cuando nos conocimos, cuando hace 10 añitos entramos en esas clases enormes, sin saber muy bien al lado de quién nos estábamos sentando. Ahora cada una está en un momento de su vida distinto, Me pasó una cosa curiosa, de repente una de ellas dijo algo que yo solía decir en aquella época, una expresión que utilizaba yo mucho entonces y tuve una sensación de cercanía muy especial y se me escapó una sonrisa de esas de complicidad que dicen más de lo que callan.
No sé si alguna de nosotras creería que hoy estaríamos así, la verdad es que creo que ninguna. Empecé a trabajar aquí sin grandes expectativas, luego pensé que quizá yo podía cambiar un poco esto, a veces creo que lo hice, a veces creo que lo hago cada día un poco. Otras creo que esto me ha cambiado a mí.



Lo tuvimos en las manos
y también ante el espejo,
y saltó en mil pedazos,
hizo polvo nuestros sueños.

La vida moderna
es nuestra condena,
las prisas,las penas,
y los pisos de treinta

La Habitación Roja

Siempre nos quedará el humor

Nada, que se han propuesto que Rajoy me despierte sonrisas.



La sexta ya ha pedido perdón, a mí me ha hecho mucha gracia.
Menos mal que en estos días inciertos en que vivir es un arte con tanta crisis y tanta noticia deprimente todavía nos podemos reir a veces viendo las noticias.

Y hoy no pongo canción porque es tarde y no sé qué narices hago todavía en la oficina. Fijaos si estoy rebelde :P. Eso sí, dejo una frase de una canción de Celtas Cortos.