Lo que el sueño nos dejó

Me he levantado con el mismo dolor de cabeza con el que me acosté ayer. No siempre se lo lleva todo la noche.
Siempre me cuesta ponerme en marcha por la mañana, necesito un periodo de adaptación, no puedo mantener una conversación hasta después de desayunar. Sin embargo esta mañana no he tardado más de 30 segundos en recordar cómo me acosté ayer. La misma sensación me ha acompañado desde primera hora y no parece que se vaya a separar de mí en lo que queda de día.

Me voy a ver si hago un poco de deporte, a ver si sudo la triteza.




A ti te estoy hablando, a ti,
que nunca sigues mis consejos,

a ti te estoy gritando, a ti,
que estás metido en mi pellejo,

a ti que estás llorando ahí,
al otro lado del espejo,

a ti que no te debo,
más que el empujón de anoche

que me llevó a escribir esta canción.

Sabina