*CDC: Centro de Control y Prevención de enfermedades.
Por Rady Ananda, 15 de diciembre de 2010
Después de que el autor Ben Hewit revelase que la cifra que se cita muy a menudo de 77 millones de enfermedades al año ( en Estados Unidos) producidas por los alimentos, procedentes de un estudio llevado a a cabo en 1999, y que generalmente se asume, el Centro de Control Y prevención de Enfermedades hizo una estimación de 48 millones. La revisión asume algo que Hewit nos explica:
“Con menos frecuencia se afirma que el estudio de 1999 termina con una línea que dice: los agentes desconocidos representan aproximadamente el 81% de las enfermedades transmitidas por los alimentos y hospitalizaciones, y el 64% de las muertes. En otras palabras, una gran parte de las enfermedades, muertes y hospitalizaciones son sólo eso, suposiciones. Los números no hacen otra cosa que extrapolar las estimaciones de las muertes producidas por gastroenteritis por causa desconocida”.
El CDC nos asegura que se han identificado 21 patógenos transmitidos por los alimentos, responsables de 9,4 millones de enfermedades al año, pero:
“ Los 38 millones de enfermedades restantes son producidas por agentes no especificados, que incluyen agentes desconocidos de los que no se poseen suficientes datos como para hacer estimaciones específicas, agentes todavía no reconocidos de enfermedades producidas por los alimentos, y agentes todavía no descubiertos”.
¿Agentes no especificados? ¿Todavía no reconocidos? ¿Todavía no descubiertos? ¿Entonces cómo se sabe que producen 38 millones de enfermedades transmitidas por patógenos de los alimentos? Esto significa que las dos terceras partes de todas las enfermedades supuestamente producidas por los alimentos está basado en una fantasía del CDC.
Paul Blake de Herb Prof dice: “ Han entrado en el mundo de lo anecdótico, el mismo lugar al que dicen ellos deben ir los naturópatas”.
En lugar de las 5.000 muertes anuales, ahora el CDC dice que son 3000 las personas que al año mueren por patógenos transmitidos en los alimentos. En lugar de 325.000 hospitalizaciones anuales, ahora habla de 128.000. Pero no compare esas cantidades, dicen ellos, porque las técnicas de recogida de datos son distintas. Hicieron menos supuestos.
Francamente, no creo que 1 de cada 6 norteamericanos enfermen por alimentos contaminados. Oiríamos hablar de ello, conoceríamos a algunos de ellos personalmente, probablemente de nuestra familia, aquellos que acudiesen de forma repetida al baño. La última revisión del CDC no parece concordar con la realidad. Se trata simplemente de una táctica para meter miedo a la gente y apoyen la ley federal de suministro de alimentos.
En el mismo comunicado de prensa, el CDC pide al Congreso aprobar La Ley de Modernización y Seguridad Alimentaria (FSMA), que ampliaría los poderes de la Agencia de Alimentación y Administración de Fármacos (FDA), y eso porque relacionan cada patógeno presente en la comida con la enfermedad o la inevitable muerte. (La inmunidad se desarrolla después de la exposición, y en esto no se necesita ninguna interferencia por parte del gobierno en los procesos naturales).
Como una renovación, la Ley de Modernización y Seguridad Alimentaria fue incluida en la Ley de gastos del Senado, que fue rechazada el pasado jueves sin someterla a votación, dada la oposición a un proyecto de ley que se extiende por 2000 páginas. Por tanto, es probable que la factura por la comida no se pase este año, a menos que el Senado la incluya en la Resolución Continua que ahora se está ultimando. La gente se está animando a llamar a los Senadores para que se opongan a que el nuevo proyecto de Seguridad Alimentaria sea incluido en el nuevo CR, que será aprobado en la medianoche del sábado.
Mientras tanto, el CDC no se ocupa de las 106.000 muertes causadas anualmente (desde 1998) por medicamentos aprobados por la FDA. Ni el CDC ni la FDA quieren oír hablar de las muertes iatrogénicas, aquellas muertes causadas por error médico o por tratamientos prescritos por un médico. En 1997, estos errores médicos causaron 420.000 muertes, según el doctor Lucian L. Leape ( según citan el doctor Gary Null y Adláteres).
¿ Puede usted imaginarse el follón que se iba a amor si los agricultores por error causaran 420.000 muertes al año?
Si los de la FDA estuvieran realmente preocupados por la salud pública, algo diría de las medicinas y los médicos. Y no asaltarían a los productores y distribuidores de alimentos naturales. Habrían cerrado las granjas de Wright County, cuyos productos enfermaron a más de 1600 personas, en lugar de cerrar la Lechería Morningland, cuyos productos no enfermaron a nadie. Las preocupaciones de la FDA no podían ser más transparentes, sólo les falta llevar un logotipo de Monsanto.
Asimismo, La Ley de Modernización y Seguridad Alimentaria no trata sobre la seguridad, se trata de aniquilar a los pequeños productores de alimentos a través de pesadas normas, honorarios excesivos y multas, interfiriendo en el normal desarrollo del negocio, de modo que todo beneficia a las multinacionales, cuyos ex ejecutivos y abogados se sientan ahora en el Gobierno federal.
Durante el debate en el Senado de la Ley S510, hemos oído por todos lados que “Estados Unidos tiene uno de los suministros alimentarios más seguros del mundo”. Quizás los defensores de la Ley SW510 no oyeron ese dicho popular: “ Si no está roto, no hace falta arreglarlo”.
Este proyecto de ley trata de destruir a los productores de alimentos frente a los grandes de la alimentación, produciéndose un monopolio en el suministro de alimentos. Se extiende el alcance federal más allá de lo permitido por la Cláusula de Comercio de la Constitución estadounidense, procurando regular el comercio interestatal. Destruirá economías locales de producción de alimentos. Es un ataque contra la libertad personal de poder alimentarse con productos naturales, puros, lejos de los alimentos irradiados, clorados, medicados y cargados de pesticidas, que ya nos domina.
La Ley de Modernización y Seguridad Alimentaria es inconstitucional, es desmesurada.
Rady Ananda comenzó a bloguear en 2004. Su trabajo ha aparecido en varias publicaciones impresas , incluyendo tres libros sobre el fraude electoral. La mayor parte de su carrera estuvo dedicada al trabajo de abogado de investigación y como asistente legal . Se graduó en la Universidad Estatal de Ohio en la Escuela de Agricultura.
http://dissidentvoice.org/2010/12/cdc-revises-estimates-of-foodborne-illness/