Gerard Piqué inicia su tercera temporada en el Barça después de protagonizar una espectacular progresión que le ha llevado a ser considerado, con solo 23 años, uno de los mejores defensas del mundo.
El 27 de mayo de 2008, Piqué retomaba su etapa azulgrana interrumpida en 2004 cuando con 16 años fichaba por el Manchester United. Después de cuatro temporadas bajo las órdenes de Sir Alex Ferguson y un año de cesión al Zaragoza, el socio 48.212 veía cumplido su sueño: jugar con el primer equipo del Barça, un sueño que, dos años después, ha superado todas las expectativas.
Un defensa del siglo XXI
Desde su debut en partido oficial ante el Wisla de Crakovia en la ida de la fase previa de la Liga de Campeones, Piqué se ha convertido en el prototipo de central del siglo XXI. Físicamente poderoso, dotado de un gran sentido de la colocación y con la técnica de un organizador, Piqué personifica en un solo jugador todas las virtudes de un futbolista total.
En las dos temporadas que ha jugado con el Barça, Gerard Piqué ha disputado 86 partidos oficiales y ha demostrado ser un jugador tan fiable en defensa como eficaz en ataque.
Solidez defensiva, garantía en ataque
Piqué es uno de los defensas menos sancionados de la Liga ya que coomete menos de una falta por partido, un promedio muy bajo para un defensa. Le han enseñado un total de 20 tarjetas amarillas y sólo ha visto una roja directa.
En el juego ofensivo, Piqué también ha sido un jugador muy importante tanto en la fase de creación como en la goleadora. Ha marcado 7 goles, algunos tan recordados y celebrados como el sexto gol en el Santiago Bernabeu, el tercero contra el Espanyol en la Copa del Rey o el que inauguraba el marcador ante el Inter en la fase de grupos de la Liga de Campeones.
Gerard Piqué inicia la tercera temporada como azulgrana en la cima futbolística pero consciente de que la credibilidad se gana día a día como lo ha venido haciendo desde aquel mes de mayo del año 2008 cuando se presento ante la afición en el Camp Nou
